Salteado de shiitake, patatas confitadas y yema de huevo crujiente
Receta sencilla, con la que nos damos un delicioso homenaje gastronómico, disfrutando de productos tan estupendos como estas setas shiitake frescas.
Si queréis podéis servirlo con un huevo poché en lugar de la yema de huevo crujiente, aunque yo os animo a que la probéis a hacer, ya que es muy fácil y el resultado merece la pena.


Ingredientes:
Patatas
Cebolla
Setas shiitake frescas
Aceite de oliva
Sal
Para la yema de huevo crujiente:
Yema de huevo
Aceite de oliva
Lo primero de todo que tenemos que hacer es congelar las yemas de los huevos, para ello untamos un papel film con aceite, ponemos una yema de huevo y cerramos. Cuando tengamos todas las yemas envueltas, las metemos con cuidado en el congelador por lo menos dos horas.
Pelamos, lavamos, secamos y cortamos, como para tortilla, las patatas.
Picamos la cebolla.
En una sartén con abundante aceite, a temperatura media-baja, ponemos a confitar las patatas junto con la cebolla. Cuando veamos que están blandas, quitamos el aceite, subimos el fuego, añadimos las setas, limpias y troceadas, y cocinamos todo ello junto unos cinco minutos.
Sacamos y ponemos en un plato con papel absorbente. Luego las ponemos en la fuente donde vayamos a servirlo.
Mientras tanto, calentamos abundante aceite en una sartén bastante pequeña.
Sacamos las yemas del congelador, las untamos con aceite y las rebozamos en el panko.
Las vamos friendo en la sartén, de una en una, unos 30 segundos.
Sacamos y ponemos encima de las setas y las patatas.
Ahora sólo nos queda ¡disfrutar de este delicioso plato!
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