Este postre es estupendo, tanto para los que les gusta el turrón como para los que no.
Fabuloso para estos días de fiesta para no tenernos que complicar demasiado en la cocina, porque es muy fácil de hacer y además está realmente bueno.
Ingredientes:
1 cucharadita de cremor tártaro
200 ml de nata para montar
40 gr de azúcar
3 cucharadas de coñac
200 gr de turrón de alicante
100 gr de polvo de cacao puro
Nueces pecanas caramelizadas
Lo primero de todo que vamos a hacer es triturar el turrón y mezclarlo con el polvo de cacao. Reservamos.
Separamos las claras de las yemas.
Batimos las yemas con el azúcar hasta que la mezcla blanquee. Añadimos el coñac y mezclamos bien. Reservamos.
Montamos las claras a punto de nieve con una pizca de sal y con el cremor tártaro. Reservamos.
Montamos la nata y la mezclamos con las yemas blanqueadas, con movimientos envolventes, con cuidado para que no pierdan volumen. Añadimos también las claras y mezclamos igual.
Forramos un molde alargado con film transparente. Ponemos en el fondo una capa de la crema anterior, cubrimos con otra capa de la mezcla de turrón y chocolate. Repetimos, alternando capas, hasta terminar con una capa de la mezcla de la nata con los huevos.
Tapamos con papel film transparente y lo metemos en el congelador por lo menos durante cuatro horas (si es toda la noche, mejor).
Cuando vayamos a tomarlo lo sacamos del congelador quince minutos antes y lo coronamos con las nueces pecanas caramelizadas (si no tenéis, podéis espolvorear por encima la mezcla del turrón con el chocolate)
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