Tiramisu
en cuenco de chocolate
El
tiramisú es un postre frío de cuchara que se monta a capas, por eso que como
los cuencos de chocolate también tienen que estar fríos, esta es una forma diferente de presentarlo.
El
tiramisú es de esos postres que no son empalagosos ni demasiado dulzones, por
eso que el chocolate le va muy bien. Cuanto más tiempo se deje reposar, más
bueno está, porque así los sabores se concentran.
Los
cuencos de chocolate a parte de llamativos son muy fáciles de hacer. Hay que
hacerlos el día anterior a hacer el tiramisú.
Ingredientes:
Para
los cuencos de chocolate:
500
gr de chocolate para postres
4
globos
Para
el tiramisu:
200
gr de bizcochos de soletilla
250
gr de queso mascarpone
60
gr de azúcar + 1 cucharada de azúcar
3
huevos
1
vaso de café bien concentrado
1
chorro de ron
Cacao
en polvo
El
día anterior vamos a hacer los cuencos, para ello lavamos los globos.
Los
inflamos hasta que tengan el diámetro
que queramos los cuencos. Los secamos muy bien.
Troceamos
el chocolate y lo fundimos en el microondas, programando de 30 en 30 segundos y
removiendo cada vez.
Ponemos
en la meseta una lámina de silicona.
Una
vez que haya enfriado un poco el chocolate, introducimos cada globo en el bol,
aproximadamente hasta un poco menos de la mitad y lo giramos para que se cubra
bien.
Colocamos
cada globo sobre la lámina de silicona.
Los
dejamos secar a temperatura ambiente o en la nevera.
Una
vez que están ligeramente fríos, volvemos a untarlos con el chocolate y
volvemos a dejarlos enfríar, pero está vez tienen que enfríar del todo.
Una
vez que se han secado del todo, con la ayuda de una tijera vamos a explotar los
globos con cuidado, para ello cortamos cerca del cierre del globo para que vaya
saliendo el aire poco a poco y lo vamos despegando de la superficie del cuenco.
Ahora
vamos con el tiramisú, y para ello separamos las claras de las yemas.
Batimos
intensamente con las varillas las yemas con los 60gr de azúcar hasta que esté
bien cremoso. Incorporamos el mascarpone y lo mezclamos todo bien. Reervamos.
Montamos
las claras a punto de nieve. Cuando empiecen a montar, vamos añadiendo poco a
poco la cucharada de azúcar mientras seguimos batiendo hasta que estén duras.
Una
vez que están bien montadas, las mezclamos con las yemas y el mascarpone con cuidado,
con movimientos de abajo a arriba.reservamos.
En
un plato ponemos el café con el ron, y allí mojamos bien los bizcochos.
Ahoramo
vamos a montar el postre, para ello cubrimos la base del cuendo con los
bizcochos, encima ponemos la mezcla de las yemas, el mascarpone y las claras. Espolvoreamos
por encima cacao en polvo. Y repetimos otra vez con bizcochos, crema y
terminamos con cacao.
Lo
metemos en la nevera para que enfríe bien.
A
la hora de servir, yo en este caso lo espolvoreé con purpurina comestible.
¿No
os parece una forma original de presentar el tiramisu?
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