Bacalao al horno, sobre patatas, con crema de piquillo confitado

El bacalao al horno sobre patatas con crema de piquillos confitados es un plato que combina sabores clásicos de la cocina mediterránea. 

El bacalao, cocinado al horno para conservar su jugosidad y textura delicada, se sirve sobre un lecho de patatas tiernas y ligeramente doradas que aportan cuerpo y suavidad. La crema de piquillos confitados, con su dulzura aromática y toque ligeramente caramelizado, envuelve el conjunto, aportando profundidad y contraste cromático. 

Esta propuesta equilibra tradición y técnica, ofreciendo un plato lleno de matices de sabor.

Ingredientes:

Lomos de bacalao

2 patatas grandes. 

1 cebolla

1 diente de ajo

1 vaso de vino blanco

1/3 de vaso de coñac

Crema de piquillo confitado

Aceite de oliva

1 huevo

2 cucharaditas de carne de pimiento choricero 

Sal gorda

1 puñado de uvas pasas

Lo primero de todo, si los lomos de bacalao son salados, los pondremos a desalar en un bol, los colocamos sobre unas cucharas de madera (para que los lomos no toquen el fondo del bol) y los cubrimos con abundante agua fría (la cual la cambiaremos por los menos tres veces al día). Y así los tenemos un día entero.

Una vez que están desalados, los sacamos y los secamos bien. Reservamos.

Pelamos y cortamos las patatas en rodajas finas. Hacemos una cama de patatas en una fuente apta para horno, las regamos con aceite, sal, pimienta y horneamos a 180 °C durante 20–25 minutos, hasta que estén tiernas y ligeramente doradas.

Batimos el huevo y rebozamos en él los lomos de bacalao. 

Los freímos en una sartén con aceite (sólo hay que sellarlos, no hay que freírlos demasiado porque se terminan de hacer en el horno). Se sacan y se colocan sobre las patatas. 

Para la salsa picamos la cebolla y el diente de ajo, sofreímos todo ello en una cazuela o sartén honda. Añadimos la carne de pimiento choricero y sofreímos todo un par de minutos.

A continuación añadimos la crema de piquillo confitado. Lo cocinamos todo ello junto durante otro par de minutos. 

Añadimos el vino blanco y el coñac y dejamos reducir durante unos 10 minutos. 

Mientras tanto precalentamos el horno a 200º.

Una vez que la salsa está, la pasamos por la batidora y la echamos por encima de las patatas y del bacalao. Sobre la salsa echamos las uvas pasas.

Horneamos durante unos 12 minutos, o hasta que veamos que el bacalao se desconcha bien.